Para este cóctel debemos tener la coctelera a mano para que se mezclen mejor estos ingredientes. Añadimos a partes iguales whisky y zumo de limón, las cantidades pueden variar en función del número de personas a las que sirvamos esta bebida. Incorporamos una cucharada de azúcar o más, si queremos darle un sabor más dulce. Mezclamos y añadimos el hielo. Servimos con la rodaja de limón para decorar con un poco de azúcar en el borde de la copa.
En el interior de un vaso de whisky sitúa el terrón de azúcar, sobre el mismo deja caer unos dos o tres chorritos de angostura. Añade el agua al vaso y con ayuda del machacador disuelve el azúcar hasta tener un jarabe rojizo. Añade 2 o 3 cubos de hielo y 30 ml de whisky. Revuelve todo suavemente con una cuchara. Añade otros 2 o 3 cubos de hielo y el resto del whisky, y vuelve a mezclar todo. Añade la cáscara de naranja. Como guarnición opcional puedes añadir una cereza en almíbar.
Ponemos todos los ingredientes en la coctelera con un poco de hielo picado. Es importante que esté muy frío.Revolvemos bien hasta que estén todos los ingredientes mezclados, si no tenemos coctelera podemos unir dos vasos para crear el mismo efecto.Uno de los trucos de esta receta es que necesita servirse en una copa que esté fría para conseguir destacar aún más. Servimos con una rodaja de limón.
Poner el hielo picado. Ponemos el whisky y la bebida de café, en este caso Kahlua. Para darle un toque de glamur le pondremos un triple seco que será el que una estos ingredientes. Por último, le daremos un punto cítrico a base del zumo de limón. Con esta mezcla vamos a conseguir crear un cóctel único. Agitamos y servimos en una copa con hielo. Decoraremos con una tira de naranja o limón, si nos gusta podemos ponerle nata montada por encima y un poco de chocolate.
Mezcla bien con hielo picado y cuela en una copa coctelera.